«Cerca» de un millar el festival literario Rosa y Negro de Tres Cantos. Según nuestros datos no llegaron a 500 personas. 3 sesiones de cine de menos de 20 espectadores, clase en la universidad privada de otros 25. Un monólogo de 150 personas y una entrega de premios con menos de 100, 1 mesa redonda y 3 encuentros con autores de 40 de media (y somos generosos). TOTAL: 495 y si quitamos repetidos.
¿Cuánto ha costado?, ¿cuánto ha costado per capita?, ¿Cuántas ventas ha habido?, ¿cuántas noticias nacionales o autonómicas han dado sobre el Festival?, ¿en qué canal web se transmitió el Festival en directo y para verlo luego en diferido?, ¿Qué web tiene todos los contenidos del festival? ¿A quién se premió y con qué premio?, ¿cuánto pusieron las editoriales por esta promoción gratuita a sus libros? Responder esto es transparencia. Lo demás falsedad y postureo.
Durante seis jornadas, del 13 al 18 de febrero, que se desarrollaron en torno al Día de los Enamorados, el Ayuntamiento de Tres Cantos celebró la primera edición del Festival Literario Rosa y Negro, con la dirección de la escritora y periodista Marta Robles.
El festival, pionero en acercar la literatura romántica y la negrocriminal, realizó ayer su clausura en la Biblioteca Municipal Lope de Vega con una lectura de microrrelatos firmados por Alice Kellen, Mónica Rouanet y Myriam M. Lejardi, a cargo de la directora y de la escritora Inés Plana, seguida de un anuncio de la convocatoria del concurso de microrrelatos 2025 para colegios en institutos de Tres Cantos.
A continuación, se hizo público el fallo del premio a la Novela Rosa y a la Novela Negra de R&N 2024, patrocinado por Ámbito Cultural El Corte Inglés, por un jurado compuesto por los escritores: Marcelo Luján, Ángel de la Calle, Susana Rodríguez Lezaun, Abril Camino y Myriam M. Lejardi. Las obras ganadoras fueron El color de las cosas invisibles, de Andrea Longarela, publicada por Crossbooks, y Púa, de Lorenzo Silva, publicada por Destino, como las mejores novelas Rosa y Negra, respectivamente, de esta primera edición.
De Púa, el jurado destacó su adecuación al género, su capacidad de sorprender y el uso preciso del lenguaje”. De El color de las cosas invisibles, “su estructura, la sensibilidad que demuestra en el uso del lenguaje y la calidad de los diálogos que permite establecer una gran conexión con los personajes, incluso prescindiendo del narrador”.
A lo largo de estos seis días, una veintena de autores, participaron en mesas redondas, presentaron sus últimas novelas y mantuvieron encuentros con sus lectores, tanto en el espacio de la Biblioteca Municipal Lope de Vega como con los alumnos universitarios de The Core School.
