Trece vecinos de Tres Cantos de un complejo de chalés pillados en medio de una fiesta con alcohol, música y cachimba durante el confinamiento.
La Policía Municipal les denunció por saltarse el confinamiento del estado de alarma con un picnic en las zonas comunes.
Trece vecinos de una urbanización de chalés de alto standing de Tres Cantos fueron denunciados el domingo por la Policía Municipal por saltarse el estado de alarma y montar una fiesta en las zonas comunes con música, alcohol y una cachimba, según informaron fuentes municipales.
Las sanciones oscilan entre los 100 y los 600.000 euros o prisión de tres meses y hasta un año dependiendo de la gravedad de los hechos.
La acción policial tuvo lugar este domingo sobre las 18.30 horas, cuando varios agentes se personaron en la urbanización después de que otra patrulla, de paisano, escuchara ruido en el interior del complejo, donde las viviendas cuestan alrededor de medio millón de euros.
Al llegar al recinto, los agentes observaron que un elevado número de vecinos estaba alrededor de una mesa de terraza con restos de comida, bebidas alcohólicas, una cachimba y un amplificador, a través del que estaban poniendo música.
Los policías comenzaron a identificar uno a uno a los asistentes, entre los que se encontraba el presidente de la comunidad de vecinos. Uno de los vecinos se encaró con los agentes, a los que llamó «payasos» y les dijo que estaban «haciendo el ridículo» con su intervención.
Ayer mismo comentábamos la gravedad de la pandemia en Tres Cantos donde han fallecido ya entre cuarenta u ochenta personas. Hoy nos levantamos con esta noticia. Es preocupante que a pesar de las campañas institucionales y privadas sigamos todavía «jugando».
Todavía hay gente que sigue pensando que si no tiene síntomas no puede contagiar el Coronavirus. La expresión de «asintomático» todavía no ha calado del todo en la población.
¿Quien querrá ir a vivir con esos vecinos en los 6 chalés que todavía hay a la venta?